Sin titulo
la nostalgia absurda de un mañana que aún no llega...
Soy la ausencia de tristeza,
que intenta contagiar
con una simple sonrisa
la pobreza de mi gente...
Soy el clamor oculto,
de los gritos del silencio
que se ahogan
en las bocas de un pasado
que glorioso,
aún destella en las canteras verdes
de mi suelo,
tan solo soy el hombre,
el oaxaqueño que intenta con el poder de la palabra,
-que se plasma entre la tinta que recorre,
los matices de gris de
una cultura que se niega
a morir en el olvido-,
convertir a la esperanza
en estandarte de coraza,
convertir a los sueños
en la realidad de compartir
el don, el poder de
ejercer la sabia expresion
legada hace miles,
miles de años,
de solo amarnos
los unos a los otros...
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